La lluvia cree no saber cuando practica lecciones de cirugía sobre la oquedad de una roca, mientras el viento pensativo y con ceguera observa la escena desde su efigie de silueta desnuda.
Perpetuidad sencilla y absurda, complicada, completa, cotidiana.
Buscar razones no acarrea más errores que aciertos, sí evidencia nuestra naturaleza.